El periodismo volvió a sacar pecho ayer en la ciudad maragata con la entrega de los premios Maite Almanza-Ciudad de Astorga y que reconoció un artículo de la jefa de sección de Cultura de este diario, Verónica Viñas, y la trayectoria profesional del también exdirector de este periódico, Fernando Aller.
Un galardón que recuerda a la periodista que durante más de quince años narró desde estas páginas el día a día de Astorga y comarca y un reconocimiento que pretende ser altavoz de los valores patrimoniales, culturales y sociales de la zona convirtiéndose en una de las distinciones periodísticas más destacadas con el paso de las ediciones, y ya van siete.
El acto de entrega de estos premios, que se celebró ayer por la tarde en la sala de congresos y exposiciones del Teatro Manuel Gullón, comenzó con una breve introducción del alcalde, Arsenio García, que destacó que «Astorga siempre ha sido una ciudad de tradición de letras y esta cita reconoce el prestigio de los periodista en la tarea de informar sobre Astorga, la comarca y la provincia». Asimismo, ensalzó la figura de los periodistas, de los que dijo que «sirven para hacer libres a los ciudadanos y necesitamos su rigor a la hora de contar las noticias».
El invitado de honor este año fue el ganador del galardón a la trayectoria profesional en la edición anterior del Premio Maite Almanza, Ángel María Fidalgo, que realizó un pequeño discurso donde hizo una reflexión de lo que ha sido el periodismo en Astorga a lo largo de su historia. De la misma forma, felicitó a los dos periodistas premiados aseverando en tono jocoso que «son dos periodistas estupendos pero su único defecto apreciable es el de no haber nacido en Astorga».
Tras las palabras de Fidalgo, el acto continuó con la entrega de premios. Verónica Viñas fue la primera en recoger su estatuilla, por su artículo ‘Una bruja de cuento en las saga Panero’, publicado el 7 de agosto de 2018 en este periódico, que pretende «desmitificar» el personaje de Felicidad Blanc y descubrir su faceta de escritora, que ha pasado inadvertida a la sombra del resto de los miembros de la familia.
Viñas mostró al jurado su agradecimiento por premiar su artículo porque «se trata de un premio muy especial para los que trabajamos en el Diario de León, porque lleva el nombre de una compañera a la que todos llevamos en el corazón». Además, apuntó que para ella también es especial porque «en Astorga estudié COU y en la ciudad pasé un año maravilloso». También aseguró que el premio va dedicado a Felicidad Blanc y destacó que «esta ciudad tiene un material inagotable con la familia Panero».
Seguidamente, el que fuera director de este periódico entre 1997 y 2010, Fernando Aller, recibió el Premio a la Trayectoria Profesional de un periodista de la provincia que otorga el Ayuntamiento astorgano junto a la Diputación de León. Aller afirmó que para él es un «honor» recibir este premio, además de «una gran alegría por recibir en persona y no a título póstumo tras 42 años de actividad profesional». En su discurso también tuvo palabras de agradecimiento para toda su familia, para todos los compañeros con los que ha compartido profesión a lo largo de toda su carrera periodística.