La alcaldesa de Astorga, Victorina Alonso, remitió ayer un escrito en el que muestra su pesar por la pérdida de la periodista de Diario de León, Maite Almanza, fallecida el sábado, tras una larga enfermedad. Alonso también destaca las cualidades profesionales de Almanza. Por otra parte, el médico de familia y escritor Luis Fernández Terrón, también remitió un escrito refiriéndose a la reportera.
La alcaldesa de Astorga destaca en su escrito la naturalidad en la forma de escribir de la periodista, encargada durante tres lustros de la información de Astorga y sus comarcas. «Escribías como se respira, tranquilla y esencialmente. Era tu forma de estar en el mundo, redactando sucesos rápida y oportunamente, pero también con respeto, sabiendo que las palabras son armas cargadas de futuro».
Alonso también se refiere al amor que Maite Almanza sentía por el periodismo: «Esto es lo mío —me dijiste una vez—: ser periodista, contar lo que sucede y hacer lo que se puede», palabras a las que la regidora añade la «pedagogía del respeto, de la pluralidad, del apoyo mutuo», que practicaba la periodista maragata.
La alcaldesa recuerda sus años en las Cortes castellanas y leonesas y «las muchas veces que me ayudaste buscando información para presentar una iniciativa en las Cortes de Castilla y León, guiando mis pasos por las publicaciones para completar mis propuestas». Además de describir a la «periodista de raza», Alonso destaca sus cualidades de «mujer entrañable, detallista, bondadosa, amante de los tuyos: tu niño ahora, tus padres, tu tío, la abuela, tu marido» de Almanza, además de mostrar lo incomprensible de su fallecimiento.
«Cuídanos, Maite, desde ese lugar (se refiere al cielo), a todos los que hemos quedado aquí desolados con tu partida. Atónitos. Desorientados. Sin saber qué hacer ni dónde acudir para calmar esta pena», finaliza.
Por su parte, el doctor Fernández Terrón —autor de los libros Cuentos con poesía, cuyas ganancias entregó a Manos Unidas, y El sueño de un cuento— manifiesta en una carta, escrita desde el punto de vista del protagonista de varias informaciones de Almanza y, posteriormente, amigo de la redactora, su gratitud por el trabajo que desarrolló y la define como persona «honesta, solidaria, infatigable, trabajadora y gran profesional del periodismo».
Los periódicos, agotados. La noticia del fallecimiento de la joven periodista agotó ayer los ejemplares de este periódico en los quioscos de Astorga, buen indicador de la merecida fama de la que gozaba y del cariño que le tenían en su ciudad.