Bajo la luz de Cristo, imagen de Dios invisible, primogénito de toda criatura, el Concilio habla a todos para esclarecer el misterio del hombre y para cooperar en el hallazgo de soluciones que respondan a los principales problemas de nuestra época. (Gaudium et Spes nº 9).
Ocupa esta parte de la fachada el bloque temático del mundo contemporáneo a la luz de la reflexión eclesial. Las características arquitectónicas de esta parte son iguales que las de su correspondiente en el lado derecho. Se resuelve la composición figurativa de la siguiente forma:
En la parte inferior del lateral izquierdo, a los lados de la puerta lateral de entrada, se representa la figura alegórica de la sociedad y la pareja humana. En la parte superior, se encierran en tondos los títulos de los aspectos más importantes sobre los que tiene que apoyarse el mundo de hoy. Se concluye esta parte temática con la representación alegórica de las virtudes justicia, paz y verdad. Todo ello a la luz de la reflexión (posiblemente de forma muy limitada) de la constitución conciliar Gaudium et spes.